Con el objetivo de que las familias afectadas puedan regresar a sus viviendas, el municipio de La Plata inició la demolición controlada del edificio que resultó gravemente dañado por el incendio ocurrido semanas atrás.
El intendente Julio Alak estuvo presente en el lugar supervisando el operativo, que se desarrolla de forma progresiva, retirando peso desde la parte superior para evitar colapsos.
El trabajo, que podría extenderse unas tres semanas, está a cargo de un equipo de operarios especializados y cuenta con dos grúas de gran porte: una equipada con mordaza, que actúa desde el exterior, y otra con pala, para desmontar sectores internos inestables.
La demolición es monitoreada por el Colegio de Ingenieros de la Provincia y por especialistas en estructuras de la Universidad Tecnológica Nacional.
El operativo cuenta con la asistencia de personal municipal de distintas áreas, además de efectivos de la Policía Bonaerense, Bomberos, Infantería, Defensa Civil y la Cruz Roja.
Por razones de seguridad, se dispusieron cortes de tránsito en calles 2 y diagonal 77, 2 y 48, y en 3 y 47.
Según informaron, la intervención fue autorizada por la Justicia y permitirá el retorno progresivo de los 190 damnificados. De ellos, 20 fueron alojados en hoteles y actualmente 7 personas permanecen en esa condición, mientras que el resto encontró soluciones temporales por cuenta propia.
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