10 Octubre 2024

Gracias al respaldo de diputados del PRO, algunos radicales, diputados tucumanos que responden a Jaldo y otros que se abstuvieron o estuvieron ausentes, el presidente Javier Milei logró mantener su veto a la ley de Financiamiento Universitario, que buscaba ajustar los salarios de docentes y no docentes en las universidades públicas según la inflación.

En cuanto a las diputadas de Quilmes, se presentaron posturas divergentes. La legisladora del PRO, María Ángeles Sotolano, votó en defensa del veto. En sus redes, resaltó la coherencia de su bloque y valoró el aumento del 6,8% a docentes y la inclusión de la Garantía Salarial. Sotolano indicó que el debate sobre el financiamiento universitario será parte del Presupuesto 2025 y destacó la importancia de auditar los gastos de las universidades.

Por su parte, la diputada de la Coalición Cívica, Mónica Frade, votó en contra del veto, apoyando la ley. Desde sus redes, Frade criticó a quienes respaldaron el veto, reafirmando su compromiso con la educación pública y advirtiendo sobre el impacto de la votación en el futuro de las universidades

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