09 Mayo 2025
Un hombre de nacionalidad boliviana fue asesinado a golpes por un grupo de vecinos en Berazategui, luego de manejar alcoholizado, subirse a la vereda con su vehículo y causar daños menores. La justicia, parece, llegó en forma de puño cerrado y celular en mano.
Richard Flores Mercado, de 36 años y oriundo de Cochabamba, circulaba por avenida Florencio Varela —límite entre Quilmes y Berazategui— y calle 125 (Berazategui) cuando perdió el control del auto. Chocó contra un cartel y derribó algunos cajones de una verdulería. No hubo heridos. Pero eso no importó demasiado.
Vecinos y comerciantes lo increparon entre insultos hasta que uno de ellos decidió aplicar una “sanción ejemplar”: le dio una trompada tan violenta que lo dejó desmayado. El resto, lamentablemente, siguió pegando. La escena fue filmada por un testigo y, como manda el nuevo protocolo ciudadano, se viralizó rápidamente.
En el video se lo ve a Flores Mercado en evidente estado de ebriedad, tambaleante y apoyado sobre su auto. Apenas logra sostenerse cuando recibe el golpe. Se desploma, y la agresión continúa en el suelo. Nada de discusión ni pelea: solo castigo, grabado y aplaudido desde las redes.
Amigos de la víctima denunciaron el hecho como un acto cobarde. “A Richard lo mataron de una piña, sin anestesia. No fue una riña de bar, no fue una pelea entre iguales”, escribieron en redes sociales.
Para completar el cuadro, a los golpes se sumó la discriminación: “Que se vaya a su país”, le gritaron, como si manejar borracho justificara una paliza letal, y como si la nacionalidad convirtiera una infracción en una amenaza nacional.
Este jueves, Richard fue enterrado. Su madre viajó desde Bolivia para despedir a su hijo.
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